ETA, (Euskadi Ta Askatasuna, que en castellano significa País Vasco y Libertad), es una organización terrorista nacionalista vasca, independentista y marxista-leninista que empleaba la lucha armada como método para obtener la independencia del País Vasco de los estados de España y Francia utilizando el asesinato, el secuestro y la extorsión.
Hace días, en un comunicado enviado en vídeo a diferentes medios, ETA ha anunciado el cese definitivo de su actividad armada. Aunque aún no han tomado la decisión de disolverse, la banda dice adiós a las armas tras 50 años de atentados. Antes intentará negociar con el gobierno el futuro de los 7 centenares de presos.
El comunicado, leído por 3 encapuchados, solicita “hablar directamente” con el Gobierno para resolver las “consecuencias del conflicto”; es decir, la situación de los presos y los etarras que viven en la clandestinidad y superar lo que la organización llama “la confrontación armada”. En el vídeo, difundido exactamente un mes antes de las elecciones del 20-N, ETA responde a la petición que el 17 de octubre le hicieron 6 personalidades internacionales en una Conferencia en San Sebastián.
Sin embargo, el mensaje de ETA es más preciso y claro que el emitido por la Conferencia de San Sebastián. El anuncio de la banda terrorista está claro y es que no se va a convertir en un tutor político, sino que sólo se va a ocupar de sus presos. Por eso no habla de disolución. No obstante, el comunicado de ETA tiene un valor inédito e histórico porque responde a lo que le llevan pidiendo los partidos desde la constitución de la democracia.
Sr. Y
